Frascos de cuello ancho de uso general; fáciles de llenar y vaciar; conformes a las normas para sustancias alimentarias. El cuello largo roscado garantiza un cierre a prueba de fugas. Tapón con sistema de cierre integral totalmente estanco. Cuello y rosca según las normas DIN 13316 y 168. PRODUCTO IDÓNEO AL CONTACTO CON ALIMENTOS.